miércoles, julio 20, 2005

Cuento de una sirena

….. en un mar lejano donde el agua rompía contra unos riscos, Vivian allí unas sirenas… había una en especial a la que le encantaba nadar sola perderse por las profundidades y de vez en cuando salir a la superficie cerca de los barcos de pesca, cosa totalmente prohibida, si su padre se enterara e eso seguramente no podría volver a hacerlo, pero ella era feliz así disfrutaba de poder nadar en plena libertad. Un día se acerco mucho a uno de esos barcos y vio un chico joven como ella tirando de unos amarres pudo ver su mirada y cuando por un instante le pareció que el clavaba sus ojos en ella una sacudida recorrió su cuerpo, nunca había sentido algo así, y pos si la veía se zambulló rápidamente en las profundidades.

Estuvo varios días dándole vueltas a lo que había visto y sentido, no podía contárselo a nadie si alguien se enteraba de que había estado tan cerca de los humanos seria la ultima vez que podría hacerlo… pero siguió nadando al lado del barco… Una tarde vio al chico que tomaba una barca de remos y se alejaba el solo del gran barco, le siguió y cuando se quiso dar cuenta había desaparecido, empezó a dar vueltas buscándole pero no le encontraba y entonces cuando emergió de nuevo apareció ante sus ojos, él sorprendido de tal aparición soltó los remos asustado, pero ella le sonrió y él sintió una tranquilidad se sentó al borde de la barca y empezaron a hablar….. ella le contaba cosas de las profundidades como Vivian y él le hablaba de bailes y de viajes.. y así tarde tras tarde se enamoraron…..

Un día, al comienzo del otoño, tras una noche de espantosa tormenta, la sirena se acercó al lugar donde se reunían pero el marinero no apareció y así pasaron varios días, ella seguía yendo todas las tardes y cuando empezaba a anochecer regresaba llorando…..
Y así pasó el tiempo, ya no le divertía salir a nadar ya no le hacia gracia perseguir a los delfines o hacer de rabiar a los caballitos de mar, solo se acercaba a los riscos y cantaba por su amor perdido,.
Un amanecer en el que el mar andaba revuelto vio unas extrañas cosas entre las piedras, cuando se acercó y las cogió pudo ver que eran restos del barco de su amor allí estaban maderas del barco, ropa y algunas cosas mas, entonces recordó la noche de la gran tormenta, el día siguiente había sido el primer día que ya no lo había vuelto a ver… y en su corazón supo que su amor había muerto…
Un honda tristeza le embargo ya no tenia sentido el esperar ya no tenia sentido el mar y las estrellas y nado hacia donde los grandes balleneros buscan sus presas… y cuando estuvo allí se pego a una gran ballena … se oyó un ligero zumbido cruzar el aire y un silbido callado desgarraba la tarde y el arpón se hundió en su pecho y la sirena se dejo ir al fondo del mar al encuentro de su marinero….

Dicen los pescadores que allí e el golfo de Vizcaya cuando las galeras impiden a los barcos salir a pescar, cuando la tarde se torna en oscuridad si fijas la mirada a lo lejos puedes oír los cánticos alegres de una sirena y las olas parecen que brincan felices por que en su interior nadan el alma del marinero y de la sirena…..

1 comentario:

Amapola Azzul dijo...

Lindo relato, enhorabuena.